Theo fue el regalo de Papá Noel a Beau, la pequeña de la casa. Fue adoptado por la familia con tan sólo 7 semanas.
Como el cachorro se pasaba toda la noche gimoteando Jessica, la madre de Beau, decidió dormir con él en el sofá y Theo dejo de llorar. Dos días más tarde el perro esperaba ansioso en la puerta de la habitación de Beau para dormir acompañado.
Cuando Jessica vió la paz con la que descandaban los dos pequeñajos decidió inmortalizar el momento.
Jessica Shyba colgó en Instagram y en su blog las fotos que había hecho. Las fotos han dado ya la vuelta al mundo.